Un cap de setmana màgic! Solo puedo decir que vale la pena pasar unos días en esta casa para poder apreciar como es, tranquila, relajante, en plena naturaleza, rodeada de campo, bosque, vacas, etc…y sin faltarle ningún detalle. La Mercé, la dueña, es encantadora, muy amable y al mismo tiempo muy discreta, pendiente de que no falte nada.
Hay que destacar la limpieza de toda la casa.
Es ideal para ir con niños, con su piscina, columpios, sala de juegos y tiene mucho espacio para correr y sin peligro de perderlos de vista.
Para nosotros es la casa ideal para volver y espero que sea pronto.
Gracies Mercé.
Angela